martes, 6 de noviembre de 2012

El activista! Raly Barrionuevo

Les dejamos la canción y  el video  para que se vayan poniendo a tono!



Un activista de la conciencia
en escenarios sangrientos
ese soy yo.

Soy el latido de la nodriza
que mutilaron el vientre
soy su canción.

Como abrigarte urbano changuito
pon mi guitarra en tu fuego
y date calor.

Me voy camino de la esperanza
con mi fusil remontado 
en el corazón.

Soy campesino lucha y trabajo
de La Simona hasta Chiapas
retumba mi voz.

Soy el colimba muerto en las islas
que tu memoria regresa
en cada oración.

Soy el costado rojo en tu calle
un activista sangrante 
de tierra y canción

Raly Barrionuevo en Ciudad Universitaria

El músico presenta Rodar, su nuevo disco, en la Sala de las Américas.



Raly Barrionuevo presenta Rodar, su nuevo disco, los días 8 y 9 de noviembre a las 21.30 en la Sala de las Américas del Pabellón Argentina de Ciudad Universitaria.
Este trabajo de estudio contiene 12 canciones de su autoría grabadas junto a su banda. Raly, además, comparte sus canciones con Liliana Herrero, Ariel Puchetta, Leo García, Marcelo Véliz y su quintetito, Vivi Pozzebón, Marcelo Gómez y el grupo Intihuayra, entre otros. Rodar fue dirigido y producido artísticamente por Raly y la cubana Yusa.
Entradas $ 80 y 100.



Lugar: Pabellón Argentina - Sala de las Américas
Dirección: Av. Haya de la Torre s/n. Ciudad Universitaria
Localidad: Córdoba
Comienza: Jueves 8 de noviembre 2012
Termina: Viernes 9 de noviembre 2012
Hora: 21.30 hs.
Costo: $ 80 y 100

Noche de Comedia



Cinco comediantes en escena: Silvia Anderlini, Paula Carreras, Pablo "colo" Clerc, Griselda Arce y Doly Benitez se suman solidariamente a participar en programas preventivos en adhesión al Día Mundial de Prevención de VIH – SIDA. Coordinación general de Juan Luna. Entrada: $ 40. 


 Lugar: Ciudad de las Artes 
Dirección: Av. Riccheri esq. Concepción Arenal 
Localidad: Córdoba
 Fecha: Miercoles 7 de noviembre 2012 
Hora: 22 hs. 
Costo: $ 40

Para entender un poco más allá la película, nos pareció interesante acercarles un poco más de información sobre estos procesos de colonización y colonialidad que considero están presentes aún en la actualidad..


El Proyecto del grupo Modernidad/ Colonialidad fue uno de los más importantes colectivos de pensamiento crítico activos en América Latina durante la primera década del siglo XXI. Se trata de una red multidisciplinar y multigeneracional de intelectuales entre los cuales se contaban los sociólogos Aníbal Quijano, Edgardo Lander, Ramón Grosfoguel y Agustín Lao-Montes, los semiólogos Walter Mignolo y Zulma Palermo, la pedagoga Catherine Walsh, los antropólogos Arturo Escobar y Fernando Coronil, el crítico literario Javier Sanjinés y los filósofos Enrique Dussel, Santiago Castro-Gómez, María Lugones y Nelson Maldonado-Torres. Sus trabajos pueden ser vistos como el más genuino aporte latinoamericano al Poscolonialismo, que generalmente estuvo dominado por autores provenientes de las antiguas colonias inglesas o francesas en Asia, Oceanía y el Medio Oriente.





La triple dimensión de la colonialidad

Las herencias coloniales de América Latina se dejan sentir hasta hoy en por lo menos tres áreas complementarias: el racismo, el eurocentrismo epistémico y la occidentalización (violenta o consentida) de los estilos de vida, que corresponden a las tres categorías centrales elaboradas por el grupo M/C: la colonialidad del poder, la colonialidad del saber y la colonialidad del ser.
Quijano muestra que la colonialidad del poder opera mediante un tipo de “clasificación social” establecida en el siglo XVI según el cual, la concentración de riqueza y privilegios sociales en las colonias se define conforme a la raza y el fenotipo de los individuos. En la cúspide se encuentran los “blancos”, luego los “indios” y por último los “negros”, y sobre esta base quedará también establecida la división social del trabajo. Mignolo muestra cómo ésta división tripartita de la población echa sus raíces ideológicas en el mito bíblico de las jerarquías entre los tres hijos de Noé que poblaron la tierra después del diluvio universal. Los europeos, descendientes de Jafet, tienen la preeminencia sobre los asiáticos (descendientes de Sem) y los africanos (descendientes de Cam). Castro-Gómez ha insistido en que la “limpieza de sangre” no tiene que ver primariamente con la raza y el color de la piel sino con la filiación imaginaria con un ancestro europeo. De este modo, la colonialidad del poder se expresaría no sólo en el racismo, sino también en el “blanqueamiento cultural”, es decir en la aspiración a imitar siempre modelos europeos en todas las áreas de la vida. Se accede al poder sólo en la medida en que se establece una semejanza con lo que ocurre en Europa y los Estados Unidos al nivel de las instituciones, de las costumbres, del pensamiento, de la educación, del arte, etc.
La colonialidad del saber refiere al modo en que la racionalidad tecno-científica es un factor determinante en la generación y expansión del colonialismo europeo y se convierte desde el siglo XVIII en el único modelo válido de producción de conocimientos, dejando por fuera cualquier otro tipo de “epistemes” (tradicionales o ancestrales) generadas en las colonias. Para Quijano, ya la evangelización de los siglos XV y XVI hizo que los indígenas y los esclavos africanos aprendieran a despreciar sus propias formas de producción de conocimientos para adoptar las del colonizador, que fueron tenidas como elementos de prestigio social. Castro-Gómez enseña que a partir del siglo XVIII, con las reformas borbónicas, se impone en las colonias españolas la idea de que conocer equivale a distanciarse del mundo y mirarlo desapasionada y sistemáticamente desde una plataforma incontaminada de observación que él denomina “la hybris del punto cero”. La expansión colonial europea en las Américas supone así un combate contra la multiplicidad epistémica del mundo y la imposición de una sola forma válida de producir conocimientos, tenida ahora como universal. Todos los conocimientos que no se ajusten a las reglas universales de la “episteme” dominante son vistos como “pre-científicos”. Lander muestra cómo este modelo es adoptado por las ciencias sociales del siglo XX, que empiezan a adoptar unos lenguajes y una concepción específica del mundo social (marcada sobre todo por las ciencias económicas) que se institucionaliza en los proyectos de desarrollo en los años sesenta y setenta en toda América Latina. Por su parte, Mignolo ha enseñado que el conocimiento dominante en el mundo hispanoamericano desde el siglo XIX se ha producido básicamente en dos lenguas, el inglés y el francés, coincidiendo con la hegemonía comercial de Inglaterra, Francia y luego de los Estados Unidos en el mundo. El conocimiento tiene así una clara dimensión geopolítica. Dussel hablará del “mito del eurocentrismo”: todo conocimiento tenido por “válido” es generado primero en los centros de poder del sistema-mundo para luego, desde allí, ser distribuido desigualmente hacia las periferias, que se limitan a ser receptoras pero nunca productoras de ese conocimiento. Se trata de una estructura de pensamiento muy ligada a la academia latinoamericana y a las instituciones en las que se producen conocimientos, incluyendo también al Estado.
El sometimiento de las poblaciones latinoamericanas a las lógicas coloniales se ha hecho demasiadas veces a través de la violencia. Maldonado-Torres muestra cómo a las poblaciones (sobre todo indígenas y afro-descendientes) que han sido consideradas como un obstáculo para la cristianización y luego para la modernización, se les ha negado la “humanidad”. Son vistas como poblaciones que no tienen “ser” (Dasein), que son sub-humanas, inferiores y, por tanto, resulta legítimo esclavizarlas, quitarles sus tierras, hacerles la guerra o simplemente asesinarlas impunemente. La superioridad de los modos de vida occidentales tiene como base lo que Dussel llamase el “ego conquiro” (yo-conquisto). Esta es la lógica que Maldonado-Torres ha denominado la colonialidad del ser. El “ser” es una propiedad que le pertenece a los europeos y sus descendientes criollos en las Américas, mientras que a las poblaciones coloniales lo que les caracteriza es el “no-ser” y por tanto carecen de “mundo” (en el sentido de Martin Heidegger). Son por ello los “condenados de la tierra”, como lo dijera Franz Fanon. De otro lado, Castro-Gómez, haciendo uso del concepto “biopolítica” de Michel Foucault, ha mostrado que a partir del siglo XVIII, el sometimiento a las lógicas coloniales se ha hecho también por medios no coercitivos. No se trata ya sólo de “hacer morir” a las poblaciones coloniales, sino de “hacerlas vivir”, es decir de producir para ellas unas formas de existencia que se ajusten a los proyectos de modernización. En este caso, la colonialidad del ser no es un proyecto de destrucción sino de producción, que atraviesa todo el siglo XIX y se concretiza, sobre todo, hacia comienzos del siglo XX en la mayoría de los países latinoamericanos con los procesos de industrialización. Se trata de la producción sistemática de una ontología social urbana, de unas formas de ser-en-el-mundo en la que los sujetos son libidinalmente “sujetados” al capitalismo. Anclada de este modo en las estructuras de la subjetividad, la colonialidad del ser no es percibida como algo que oprime sino como algo que se desea (“tejidos oníricos”), pues produce las condiciones materiales e inmateriales de existencia para amplios sectores de la población.




Aníbal Quijano. "Colonialidad-Descolonialidad"



PARA QUE SE PUEDAN INTERIORIZAR UN POCO MÁS EN LA TEMÁTICA, LOS INVITAMOS A VISITAR LA PÁGINA  DE LA CÁTEDRA DE MOVIMIENTOS SOCIALES CONTEMPORÁNEOS, UNA CÁTEDRA QUE DENTRO DE LA ESCUELA DE CS. DE LA INFORMACIÓN-UNC REALIZA APORTES MUY SIGNIFICATIVOS PARA COMPRENDER LA COYUNTURA LATINOAMERICANA ACTUAL:


El Trailer de la Peli




Este es el trailer oficial de "También el agua" cuyo contexto es la llamada Guerra del agua, en Bolivia

La guerra del agua de Cochabamba es el nombre popular de una serie de protestas que tuvieron lugar en Cochabamba, la tercera ciudad más poblada de Bolivia, entre los mese de enero y abril de 2000. Su detonante fue la privatización del abastecimiento de agua potable municipal.
En septiembre de 1999, impulsada por el Banco Mundial, la multinacional Bechtel firmó un contrato con Hugo Banzer, presidente electo y antiguo dictador de Bolivia, para privatizar el servicio de suministro de agua a Cochabamba. El contrato fue oficialmente adjudicado a una empresa denominada Aguas del Tunari, un consorcio empresarial en el que Bechtel participaba con el 27,5 por ciento. Poco después, surgieron quejas sobre el aumento de las tarifas del agua (servicio del que se carecía hacía varios años en la ciudad); las mismas se habían elevado en más de un 50 por ciento. Todas estas acciones culminaron en las protestas de la guerra del agua de 2000. Muchas personas se vieron obligadas a retirar a sus hijos de las escuelas o a dejar de visitar médicos como consecuencia de los precios del agua. Se declaró la ley marcial y la policía boliviana mató al menos a una persona (Víctor Hugo Daza, de 17 años) e hirió a 170 participantes en las protestas. En medio del colapso de la economía nacional y el aumento de los disturbios, el gobierno de Bolivia rescindió el contrato con Bechtel.
En Bolivia existen alrededor de 40 grupos étnicos, que en muchos casos conservan sus tradiciones, culturas e idiomas.



En 2001, la empresa de ingeniería Bechtel inició un proceso legal contra el gobierno de Bolivia, reclamando indemnizaciones por daños por valor de 25 millones de dólares. Bechtel argumentó que el contrato únicamente le permitía administrar el sistema de aguas, que era un servicio deteriorado y que fue el gobierno local quien subió los precios del agua. La batalla legal atrajo la atención de los movimientos anticapitalista y anticorrupción. Este tema es tratado en el documental canadiense realizado en 2003 La corporación (The Corporation, en su título original, y Corporaciones. ¿Instituciones o psicópatas?, en España) así como en la propia página web de Bechtel. En enero de 2006, Bechtel y otros socios internacionales retiraron la demanda contra el gobierno boliviano después de intensas protestas.

lunes, 5 de noviembre de 2012

Ciclo de Cine Latinoamericano presenta: "También la lluvia"


"No es una película intimista, pero sí creo que es de personajes, y en eso se parece mucho a las anteriores mías, pero más grande, con una parte de época y otra del presente en la que narra acontecimientos sociales que pasaron en Bolivia, pero al final es una historia en torno a dos personas, sobre todo de una, Costa, el productor, que hace un viaje personal de madurez, de compromiso personal".Icíar Bollaín (Directora)



En el marco del ciclo de cine "Latinoamericanos", mañana martes 6 de noviembre se presenta También la lluvia (De Icíar Bollaín, España, Francia y México - 2010. 1.44', con Luis Tosar, Gael García Bernal, Juan Carlos Aduviri y Karra Elejalde).


Costa, productor de cine, y Sebastián, joven realizador, van a rodar en Bolivia sobre la llegada de los españoles a América poniendo el acento en la brutalidad de su empresa y en el coraje de varios miembros de la Iglesia que se enfrentaron con palabras a las espadas y las cadenas. Pero en Bolivia, acaba de estallar la Guerra del Agua (abril de 2000) y las cosas inevitablemente cambian.



Lugar: Paseo del Buen Pastor - Capilla
Dirección: Av. Hipólito Yrigoyen 365
Localidad: Córdoba
Fecha: Martes 6 de noviembre 2012
Hora: 18.30 hs.
Costo: Gratuito